leyenda de libelos

Una mentira repetida mil veces puede convertirse en noticia. Así lo deben de creer quienes están difundiendo en las últimas semanas bulos que están provocando la alarma social en amplios sectores de la ciudad y que son tema de conversaciones en las calles y en los mercados.
No es la primera vez que se propagan falsas noticias tendentes a crear el miedo entre la población en Zaragoza y en otras capitales, donde las mismas falsedades se difunden con la incorporación de algunas variantes. En la mayoría de los casos tienen una marcada orientación racista y xenófoba.
Ya ocurrió con el falso secuestro de una mujer en el barrio de Delicias, tras entrar a comprar en un Todo a 100 regentado por comerciantes chinos y del que no volvió a salir.
En las última semanas ha surgido el rumor de que Juan Rodríguez Salvador, el violador del Valle d´Hebrón, se ha afincado en Zaragoza tras cumplir su condena de cárcel, concretamente en la calle Delicias.
A partir de este dato, rotundamente negado por los responsables de la Policía, se han extendido noticias sobre supuestas violaciones en este sector de la ciudad, hasta dos diarias, según bulos escuchados en el Mercado Central. Incluso se ha llegado a concretar que una persona había sido detenida tras forzar a una niña de 14 años. En los tablones de anuncios de colegios de La Almozara y de Delicias se han colocado pasquines para advertir del peligro.
No es una exclusiva de Zaragoza. El mismo bulo, con insignificantes cambios, se ha propagado en Burgos, Valladolid y Granada, entre otras ciudades. En el buscador Google es suficiente pinchar en violadores de Zaragoza para leer historias cada vez más fantasiosas.
Incluso la Dirección General de la Policía y la Guardia Civil barajó la posibilidad de salir al paso de estos rumores, pero se desechó la idea.
El último bulo alarmante es el de los secuestros de niños. A esta redacción han llegado rumores de secuestros cometidos en Teruel, Remolinos, Alagón y Calamocha, localidad esta última en la que habrían sido detenidos dos magrebíes tras ser sorprendidos en el delito.
También se han dado noticias de secuestros en los parques de Barcelona, Sevilla y Valencia, siempre cometidos por inmigrantes de países del Este. Se dan detalles similares. En Zaragoza se habría sorprendido en los lavabos de unos grandes almacenes a unos rumanos mientras teñían el pelo a una niña para llevársela. En un hipermercado de Barcelona, los sorprendidos fueron dos ucranianos cuando cortaban el pelo a un niño con el mismo fin.
Lamentablemente, los propagadores de bulos utilizan internet para extender el miedo con el consiguiente efecto multiplicador. En medios policiales se ha llegado a sospechar que la oleada de rumores puede tener una finalidad desestabilizadora, además de xenófoba, por parte de sus autores.